Cuatro estaciones, cuatro centros de mesa

Las mejores ideas para decorar una mesa pasan por encontrar el centro de mesa perfecto. Una forma de dar personalidad y hacer más especiales tus comidas o cenas. ¿En qué debemos fijarnos para elegir el correcto?, ¿es mejor hacerlo o recurrir a uno ya hecho? 


Hacer tu propio centro de mesa te abre infinidad de posibilidades y añadir las velas en la decoración te ayudará a darle un toque mucho más elegante y cálido. Una buena forma de acertar es inspirarnos en las estaciones o en fechas señaladas (Navidad, San Valentín…)


La primavera es perfecta para las flores y los colores vivos. Aprovecha las velas decorativas florales y déjate conquistar por los porta-velas de cerámica blanca o de cristal. Tendrán peso sobre la decoración, pero no robarán el protagonismo a las velas.


El verano es frescura, aromas cítricos y colores atrevidos. Apuesta por velas aromáticas que puedan refrescar el ambiente y combínalas con granulados o por la corteza de coco como detalle principal.


Tonos anaranjados, rojizos o cobres, hojas y decoración de madera, sin duda es la mejor opción para los centros de mesa de otoño. Las velas combinan a la perfección con este tipo de materiales, además la calidez que aporta la luz de las velas será la protagonista de la velada.


¿Y en invierno? Verdes y rojos marcan la estación con más fechas señaladas del año. Inspírate en la magia de la Navidad y súbete a la tendencia de los colores metalizados. Elementos naturales como el acebo o la planta de Navidad.


Una noche de verano, un día de primavera o los colores del otoño pueden ser el reflejo que buscamos para nuestro centro de mesa. Y recuerda, combinar velas decorativas, utilizar porta-velas o jugar con la combinación de materiales siempre es una buena idea.